Tras una horrible experiencia cuando era muy pequeña, la joven Jun siente un profundo malestar en el estómago cada vez que intenta pronunciar alguna palabra. Por ello, cada vez que intenta comunicarse debe hacerlo por correo electrónico, mensajes de móvil o por escrito. Todo parece tranquilo en la vida de Jun, aunque cada vez se sienta más sola y aislada. Pese a su mirada melancólica, el tutor de su clase desea ayudarle y decide incluirla dentro de un grupo de trabajo de clase para elaborar un musical. Esto le sorprende a Jun, que poco a poco irá abriendo su corazón y, con ello, quizás las palabras puedan salir de su voz, porque hay veces que es más doloroso guardar lo que se siente que expresarlo. Dirigida por Tatsuyuki Nagai, la película fue presentada fuera de concurso en la Selección Oficial del Festival Internacional de Cine de Animación de Annecy.