Tiene a uno de los mejores villanos de la historia

Única película de los años 90 que Clint Eastwood no dirigió y sí interpretó. Bueno, leo que hizo un cameo en Casper pero eso no lo cuento. Wolfgang Petersen, creador de la aceptable Troya logra sacar un buen thriller policíaco dirigiendo a grandes actores de la gran talla ya asentada de Clint Eastwood quien como protagonista podría pasar perfectamente como por otra película más de la saga Harry Callahan. Pero vayamos a la clave del asunto que es el villano, el antagonista, ese personaje secundario que cual Jeremy Irons en La jungla 3 quita el hipo, asombra y sorprende al espectador. No me resultaría extraño que McTiernan se inspirase en este villano para reencarnarlo el señor Irons. John Malkovich se llevó una nominación más que justa y debió llevarse el oscar aunque bien es cierto que ese año hubo mucha y muy dura competencia. No voy a hablar más del tema porque quiero que comprobéis vosotros mismos la tensión y miedo que desprende Malkovich y sus sorpresas constantes. Me sorprendió ver a McDermott (muy gracioso en Las ventajas de ser un marginado) de joven y también al mismísimo 'Jigsaw' Tobin Bell al principio de la cinta. Quizás me choque un poco la subtrama tópica del romance de Rene Russo y Eastwood pero por lo demás más allá de intentar esconder el rostro al principio de Malkovich, Petersen logra un gran thriller en un acto final predecible pero bien narrado en todo su fabuloso e intenso montaje. Buena.