La guerra desde los despachos

Normalmente, cuando se realiza una película de guerra, se centra la atención en los soldados, en los héroes a pie de batalla que se dejan la vida por el conflicto en cuestión; sin embargo, 'Espías desde el cielo' tiene como protagonistas a los cobardes, a los que desde sus despachos dan las indicaciones y orquestan las matanzas, y ahí reside su mayor baza.

Helen Mirren y Alan Rickman brillan como los dos pilares base de la película y cabría destacar a los secundarios Aaron Paul y Barkhad Abdi, quienes saben aprovechar al máximo sus escenas (sobre todo el segundo, quien desde 'Capitán Phillips' me tiene rendido). Con un plantel así de actores, el apartado interpretativo estaba salvado de antemano, por lo que, lo único que podría fallar era todo lo demás. La dirección tiene pulso y todo rezuma credibilidad pero sí que es cierto que, aunque no dura más de 100 minutos, se hace algo pesada en ciertos tramos, donde se dan demasiadas vueltas al conflicto y, quizá, extienda demasiado la tensión, lo que provoca que te desenganches llegado a un punto.

'Espías en el cielo' entretiene, enfada y molesta, osea que consigue todo lo que se propone... Lástima de la justificación final y la moralina en vena que intentan meternos.