El mayor boicot a ETA

Vemos un cartel de promoción gigante donde se tacha en repetidas ocasiones la palabra "españoool" y sentimos la llamada al boicot. Pues, malas noticias para aquellos que corrieron antes de mirar lo que escondía detrás esa bandera: han liderado una campaña en contra del mayor boicot a ETA. Sí, era una comedia, una que se ríe hasta la saciedad del terrorismo de ETA desvirtuando "la lucha etarra" con la construcción de unos personajes ridículos.

El guión de Borja Cobeaga parte de esta premisa con el conflicto de Martín, interpretado por Javier Cámara, al que se le acusa de no tener las suficientes agallas para defender Euskal Herria y la lucha armada con uñas y dientes. Así empieza la desvirtualización del comando etarra protagonista a través de la sátira.

Con la ayuda del personaje de Julián López y escenas tan ridículas como la del Trivial, se empiezan a desmontar los valores, adoctrinamiento y, en definitiva, la causa por la que se reúnen los diferentes activos del comando. Todo ello hasta convertirlo en otra cosa: el remate del esperpento.

El humor que presenta el guión de 'Fe de etarras' es un completo acierto aunque sí que es verdad que no se atreve a ir más allá, por miedo quizá a meterse en un verdadero terreno pantanoso.