Reviviendo a los clásicos

Una vez más Tim burton nos emociona reviviendo a uno de sus primeros trabajos en forma de stop motion.

Es una gran película que combina emotividad con creatividad, un niño que revive a su perro no es algo que se vea todos los días, y si luego además no es el único que revive...

se me quedará siempre un momento en la película: victor acude a su profesor porque al intentar repetir el experimento de sparky no salió igual de bien, y este le dice que ha sido por que no lo hizo con la misma emoción que la primera vez. Y esto es algo muy común en la vida real, intentamos hacer algo con mucha ilusión y esperanza, y al final resulta ser genial, cuando lo intentamos repetir, ya no tienes esa sensación y te esfuerzas menos.

También es muy destacable comentar la maravillosa banda sonora que como no, viene de uno de los grandes Danny Elfman.

Lo único que no me ha gustado mucho ha sido que estuviera en blanco y negro, y puede que con más colores, hubiera dado más vida a esos personajes tan adorables.

En resumen una muy buena adaptación del corto predecesor con el mismo título, con una buena banda sonora, un guión que no esta nada mal, y unos muy merecidos guiños a la industria cinematográfica de terror, totalmente recomendada.