
Si valoramos esta película como una adaptación cinematográfica de la novela, es pésima; sin embargo si la juzgamos como una película independiente, es entr
Sin spoilers
Aunque para mí es fácil hablar. Como me sé de memoria la saga entera. Pero no, no creo que sea posible aburrirse con esta película, nisiquiera para los que no estén al tanto del mundo literario de J. K. Rowling.
Pero los que sí tenemos conciencia de la obra escrita, nos cercioramos una y otra vez que esta peli es la que más discrepancias presenta con el libro. Pero con diferencia. Para empezar, está tremendamente mal estructurada, desde el principio. Harry sale de la nada y Dumbledore le empieza a llevar. Ni diálogos, ni explicaciones, ni pollas, así, de que pam. Luego Harry, Ron y Hermione empiezan a ir a su bola el resto de las... ¿vacaciones? Dos escenas para lo que es un mes. Se dan por supuestas demasiadas cosas. Los libros son una gozada, todos esos detalles, esas anécdotas, esos diálogos, todo tan bien explicado, descrito y relacionado, y todo eso te apetece verlo reflejado en la pantalla... Es que son obras maestras. Pero bueno, eso no afecta exclusivamente a esta peli, me pasa con todas las de Harry Potter. Todo radica en lo mismo, pero en esta es en la que eso se nota más que nunca porque es esta en la que más cosas se saltan. Después, a eso de la mitad de la cinta se inventan una escena de acción, la del ataque a la Madriguera (que acaba... ¿Quemada? ¿PERDON?) que en el libro no existe. Y es que al fin y al cabo esto es una producción comercial, si la obra adaptada carece de acción, pues hay que inventarla. Lógico. Este libro es muy denso y menos dinámico que los anteriores, lo que hace que adaptarlo sea más difícil. Pero lo que más me ha jodido es que se omitiesen los recuerdos de Tom Ryddle. Aparte de que son momentos oscuros, macabros y agradables de presenciar para cualquier espectador, son absolutamente relevantes, no se puede prescindir de ellos, ya que son vitales para entender la desquiciada y malévola condición de Voldemort.
Yo diría que esta película es más fría y oscura que ninguna otra. A lo largo de su transcurso, se percibe una continua sensación de terror, de inquietud, de impotencia y de un mundo con un ambiente más tétrico que nunca, la alegre comunidad mágica que veíamos en las primeras películas ha desaparecido por completo, y ha dado paso a una sociedad degradada, liderada por los psicópatas súbditos de Voldemort que disfrutan torturando e intimidando al personal.
El miedo, la desconfianza, los crímenes y una inequivoca sensación de que el mal ha cogido el dominio son las características del nuevo mundo mágico. Paralelamente, Albus Dumbledore, el seguro de protección y esperanza por excelencia, refleja debilidad e impotencia. Y es que el mago más poderoso del mundo no podía acabar de una manera peor, perdiendo todo su poder intimidatorio al igual que su decidida y prestigiosa esencia, justo en el momento en el que más se le necesitaba.
Esta película es triste y profunda, presenta sus propios detalles (inexistentes en la obra original) como la "chistosa condición de Dumbledore", su forma de hablar con la gente, las posturas inexpresivas de los profesores... En el libro no es así. Snape reparte siempre que puede a todos los que no sean de Slytherin, eso es bien conocido desde el primer libro. Y verle con esa impasividad ante el teatrito de Lavender Brown (que en el libro tampoco existe) sin decir ni mú, pues choca. Y lo de los Horrocruxes, en el libro tampoco es así. Largas son las charlas que presentan Harry y Dumbledore en el libro, los dos se ven muchísimo. Y Dumbledore, insisto, no es para nada, escueto en palabras y habla de forma diferente, no como en la película. Que a ver, no me ha molestado esa forma suya de ser, todo lo contrario, pero que no es así.
Después. Parece como si en esta película se ha escatimado mucho en peleas y en efectos especiales. Respecto a la 5ª, en las que vaya si se portaron, en esta se aprecia como una pérdida de intensidad, incluso en los momentos más 'bélicos', por así decirlo. Tal me lo parece. La escena entre Harry y Draco podía haber sido más violenta, y carece de la pausación con la que es descrita en el libro. Todo tan brusco... :S No, no debe de ser así. Pero con este apartado me refiero al final, sobre todo. Harry no ha presentado batalla, ni Hogwarts tampoco. Pero si en el libro venía toda una batalla. Fugaz, sí, pero intensa. Y Harry hiere a varios mortífagos... Y lucha más con Snape. Mientras que en la adaptación ha sido todo muy rápido y brusco. Y la conversación entre Draco, los mortífagos y Dumbledore es más... sustanciosa. Eso sí, Helena Bonham Carter borda su papel de malvada. Verdaderamente.
Un detalle que me ha preocupado es la suma sequedad entre los personajes, elevada a cotas increíbles. No es así. Por ejemplo, cuando Harry ve a Katie Bell, se lanza a interrogarla, obtiene lo que quiere y se va. Ni un ¿Como estás?, ni nada. Que ha estado 6 meses hospitalizada. Me podré quejar de lo que quiera, pero si por algo no he puesto el 10 a esta película, yo creo que es por eso. A muchos se la sudará, pero yo encuentro esos detalles de vital importancia.
Pero por donde más se ha criticado a este filme es por los momentos juveniles, lo cual me ha sorprendido enormemente, ya que esas escenas no se parecen en ningún momento a las de Física o Química y no son ni tan relevantes, ni tampoco tan abundantes. Es algo normal, los protagonistas están en la edad. Además es un contraste perfecto con la terrible realidad que hay afuera, es como una dulce sintonía entre un silencio frío y aterrador. Y para una cosa que ha sabido leer David Yates...
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