En realidad ¿quiénes son los salvajes?

Ruggero Deodato filmó esta película con el objetivo de criticar las formas y los métodos que los reporteros utilizaban para obtener reportajes que vendieran, y así éstos lograran la fama y el dinero. Pero Deodato lo único que consiguió fueron críticas, denuncias, controversia, y sobretodo mucha polémica. Las críticas y las denuncias fueron a él con la misma facilidad con la que las moscas van a la mierda ( perdón por la expresión ), no obstante, no recibió nada que no mereciera, ya que la atrocidad que cometió de matar siete animales durante el rodaje es un crimen grave. Sin embargo, lo que pretendía hacer también lo logró, gracias al enorme realismo que se puede apreciar durante todas las escenas de la cinta, en concreto, en las escenas más fuertes.

Robert Kerman y el resto de actores están correctos a lo largo del film, pero su trabajo pasa totalmente a un segundo plano, así que al igual que con el guión pasan desapercibidos durante gran parte de la película. Cosa que no afecta a la calidad de la cinta, ya que en los aspectos técnicos es realmente todo muy creíble ( de ahí que la realidad supera a la ficción ), gracias a que ganan importancia elementos artísticos cómo el maquillaje, la música o el paisaje, cosa que hace que estos elementos sean totalmente imprescindibles, ya que sin ellos sería solo una película más sobre caníbales, aunque sin embargo, perdería toda la mala fama que le ha otorgado la polémica y la controversia. Las escenas en que las tribus indígenas practican el canibalismo u otros ritos sagrados son realmente difíciles de ver debido a que Deodato lo lleva todo a un extremo realista pero sin cruzar la línea de la ficción, por ejemplo la mujer que aparece empalada por haber cometido un delito sexual ( que en realidad es violada por los reporteros ) o cuando Jack es asesinado por los Yanomami y éstos lo desmiembran y se lo comen. Y si tenemos en cuenta el realismo de estas escenas al igual que las del resto del film contando con un bajísimo presupuesto con el que contaban, les da un mérito tremendo. La banda sonora corre a cargo de Riz Ortolani ( grandísimo compositor y desgraciadamente fallecido este año ) que nos deleita con una maravilla para los oídos con una pieza introductoria que muestra e indica tranquilidad y que todo va bien, en los momentos de tensión, música cortada y fuerte, también hay que destacar, que en la escena final, mientra los Yanumami están asesinando a la reportera suena la música de tensión, pero en un instante de 15 segundos suena la canción principal, la que mostraba tranquilidad y que todo iba bien, lo que te creará una especie de shock, cuando en realidad es una metáfora, sádica pero una metáfora, que dice ahora que acabamos con los que han roto nuestro equilibrio, todo vuelve a ser como antes. Los paisajes que se muestran son reales , ya que en las escenas rodadas en la selva no hay decorados, y esto es otro punto a favor de la credibilidad de la película.

Si observas bien la película, comprobarás un hecho importante, que los indígenas se rigen por normas y leyes ( aunque primitivas ) y que sólo atacan y practican el canibalismo con los enemigos y con los que violan sus leyes. Lo que nos deja una reflexión," ¿ En realidad quiénes son los caníbales ? "