Vuelve... Sin despeinarse

Un guión bueno, pero no exelente. Unos efectos especiales sublimes... a veces pasados de rosca. Se hecha de menos algunos de los insultos de nuestro heroe urbano, se agradece ese Yippe-ki-yay en el momento cumbre de la pélícula y un malo a la vez de creible muy, pero que muy ironico.

Sobra el el secundario, lento y perdido entre tanta exploción, sus chistes no hacen gracias y emborra la pantalla. Y exelente su hija y ese gran Kevin Smith.

Mensión aparte para la otra mala... Maggie Q. guapa y creeible.

Sin duda una cuarta parte que nos hace olvidar la mas criticable tercera parte.

Se deja ver.