Tras la muerte de su padre, Sara abandona su futuro como pianista de jazz en Nueva York para enfrentarse al pasado de su familia como ganadera ecológica. Sara regresa a su pueblo natal en el Pirineo oscense, donde hereda, junto a su hermana, una granja y un rebaño de ovejas.

Invadida por la culpa de no haber estado con su padre en los últimos años que le quedaban, Sara rechaza la propuesta de vender el rebaño y decide preservar su legado. Ella está dispuesta a luchar por ello, aunque implique renunciar a la carrera musical que tanto esfuerzo le ha costado.

Este largometraje está escrito y dirigido por Gala García y protagonizado por Laia Manzanares como Sara, Ángela Cervantes como Elena, Anna Tenta como Tinta y Ruy de Carvaho.