Imaginativa y enternecedora

Nunca me terminó de llamar la atención esta película porque no había leído ni visto sobre ella pero al trastear por la biblioteca descubrí que era de Danny Boyle así que improvisé, me arriesgué y conseguí ver un entrañable y divertido film sobre el dinero, la fe y la bondad sobretodo. Podría decirse que es un híbrido entre Slumdog Millionaire y El cielo es real para los que hayan visto esas películas posteriormente ya que son mucho más recientes pero el estilo de Boyle sigue presente sobretodo en lo visual y en la fotografía que se remarca de manera asombrosa.

El reparto a excepción de James Nesbitt (El Hobbit, 5 minutos de gloria) es desconocido pero todos brillan en sus papeles en una historia imaginativa, original por momentos pero sobretodo entrañable y emotiva. Una historia clara, el dinero no da la felicidad y si la da es dando a los que lo necesitan y para labores necesarias. Quizás sea un mensaje típico pero es una película digna de poner a los niños a modo familiar y de poner en colegios e institutos. A algunos quizás les pueda parecer un tanto edulcorada, manipuladora y subvencionada por alguna ONG o religión pero para nada me parece así ya que sería despectivo catalogarla así. Boyle lo logra y me emociona, una de las mejores de su filmografía a mi parecer aunque evidentemente sea predecible en términos objetivos. Buena.