Cuando creías que el mundo ya se había acabado...

Cuando crecía las películas de roland emmerich eran un claro ejemplo de grandes producciones palomiteras que de verdad llenaban tardes y a veces incluso eran más que disfrutables. Con esa sensación de volver a aquella época me senté a ver la nueva locura de este genio del cine.

Resumiendo en pocas palabras, al acabar me quede con la boca abierta del despropósito de esta película.

Que conste que me gustó mucho la idea que baraja sobre el principio de la humanidad (no haré spoilers) pero de esa manera tan artificial pierde todo sentido y lo que hace es llevarnos al universo de la locura mejor que doctor strange.

Para empezar peca de lo de siempre en sus películas, un exceso de heroísmo patriótico americano y no digamos de los discursos heroicos de rigor pero en esta a veces hasta da vergüenza ajena. Unos diálogos que a veces te hacen reír donde no deberían y un caos de acción que por primera vez en mucho tiempo hacen que odie una de sus películas y mira que indepence day me pareció en su momento vomitiva (sobre todo ese monologo del presidente) y aún intento olvidar la segunda parte.

Resumiendo es una película que te sientas y al principio hasta pasas por alto todas las leyes físicas que se salta y no digamos universales en pos de la acción pero llega un punto que hasta eso ofende, ni hablemos de cuando se descubre el pastel de porque esta pasando que entonces es cuando te empiezas a preguntar ¿pero que película me puse?.

al acabar se te quedará la misma cara de tonto que a todos pero al menos si la ves en streaming te dirás que hay gente que pagó una pasta en el cine por verla e incluso compraron palomitas con la misma ilusión que tu te sentaste en tu sofá a verla y olvidarla rápidamente.