Una tontería de película que por lo menos te saca alguna que otra sonrisa

Todos los que leáis esta crítica y hayáis visto la película, habréis entrado en el cine sabiendo perfectamente a que película vais, así que no se puede decir que te sorprenda mucho lo mala que es, dado que ya te lo esperabas.

Se que muchos de vosotros compartiréis mi opinión y la otra gran parte no, pero realmente, Padre no hay más que Uno fue una película mala que pero conseguía que las risas no parasen de sonar en la sala de cine, pero esta segunda parte, aparte de ser mala, tiene trozos en los que no hay nada gracioso, sobre todo al principio, después va mejorando poco a poco.

En esta segunda entrega protagonizada otra vez por Santiago Segura, Toni Acosta, Silvia Abril, Leo Harlem, que tiene más protagonismo, y los alocados y diversos hijos, se une Loles León, en el papel de la temeraria y despiadada Suegra.

El largometraje comienza con Javier (Santiago Segura) siendo el lider del chat de padres de los patitos azules, verdes, rojos,... y todo esto gracias a la popularidad de Conchy, la aplicación que "te resuelve la vida".

Marisa (Toni Acosta), acaba de saber que está embarazada, y al hacérselo saber a Javier, a este le da un síncope. Ninguno de los hijos está contento con la noticia, y Paulita (Sirena Segura) está todo el tiempo intentando conseguir un perro.

Como el embarazo va progresando y Javier no puede ocuparse de todo, Marisa decide hacer lo que Javier no desea por nada en el mundo, llamar a la suegra...

Padre no hay más que Uno 2: La llegada de la Suegra es una película, que como ya comenté, es mala, el guion es malo, las interpretaciones son mayoritariamente malas y los chistes o giros cómicos que se supone que son el punto fuerte, y que tiene muchos que no llegan a hacerte reir.

Es verdad, que la película va mejorando, dado que el principio se basa en unas bromas que no llegan a explotar como deberían haberlo hecho, pero en cuestión de minutos va mejorando, hasta que desde más o menos la mitad hasta el final, consigue engancharte porque las bromas y diálogos cómicos funcionan a la perfección. Aunque es una película que (obviamente) tiene un estilo muy parecido al de la primera.

Es una película entretenida que, era difícil, pero no supera a la primera y contiene algún que otro giro cómico que te hará reír.

Mi nota es un 3 de 10

Lo mejor: Los giros cómicos desde la mitad hasta el final. La actuación de Loles León. La cantidad de cameos con personas famosas que aparecen.

Lo peor: El guion. Los primeros veinte minutos que son para meterte en la historia y que podrían haberse resumido mucho más para que no se te hiciera un poco pesada. La historia de amor de Leo Harlem y Silvia Abril.

Es una película para toda la familia que no merece la pena ir a ver al cine y que tiene momento graciosos que la hacen entretenida para ver descansando después de comer.