
Una oda a la libertad y al romanticismo.
Sin spoilers
Una de las películas más entrañables, pero a la vez algo atípica para los cánones del Studio Ghibli. Mezcla el espíritu de las clásicas historias de aventureros del aire con el ingenuo pero adorable optimismo de Miyazaki. Aún ambientándose en el preludio de una gran guerra, con la tensión política y la gran depresión económica, sigue habiendo lugar para una historia fantástica sobre cómo romper una maldición que convirtió a un buen hombre en un cerdo. La película está cargada de sutiles mensajes que invitan a la reflexión. No hay blancos ni negros, sino infinitos matices en los que, -como dice Madam Gina en la escena del jardín-, las cosas no son tan simples como en Hollywood. La considero una obra imprescindible para cualquier amante del cine de Miyazaki.
Críticas de los usuarios