'Que Dios nos perdone': El asesino arrinconado

En España, el thriller es el género que más ha evolucionado desde los 90, cuando Amenábar estrenó con éxito 'Tesis' y 'Abre los ojos'. Rodrigo Sorogoyen vuelve tras haber dirigido la estupenda 'Stockholm' con una cinta hipnótica que trae cierto aroma de thriller nórdico, como hizo hace unos años Alberto Rodríguez con 'La isla mínima'. El cineasta crea una película con un asesino en serie que viola y mata a ancianas aprovechando la visita del Papa a Madrid. En ese contexto, Sorogoyen, junto con la guionista Isabel Peña, crea una robusta propuesta que, junto con 'Tarde para la ira', se convierten en las mejores películas del pasado 2016.

Hipnótica, claustrofóbica y opresiva, la película muestra que sus protagonistas, tanto los policías como el asesino, tienen unos claroscuros en los que se intuye cierto desequilibrio emocional y mental y que plantee al espectador las dudas sobre si estos policías son muy diferentes al asesino al que buscan. Con una ambientación exquisita, Roberto Álamo y, especialmente, Antonio de la Torre guían al público en descenso a los infiernos al más puro estilo Fincher. ¡Fabulosa!