Poco sexo en Nueva York

Sinceramente, pensé que iba a ser peor, ya me imaginaba un Catástrofe en Nueva York gracias a leer algunas críticas. La segunda entrega de Sexo en Nueva York es, para mi gusto, bastante mejor que la primera. Cuenta con el mismo reparto, si no, no sería lo mismo, pero con un mejor guión. Yo la consideraría como una película entretenida, que te hace pasar un buen rato, y bastante graciosa, tiene algunos momentos en los que se llega a llorar de risa. Aunque, realmente, el título encaja mejor con la primera entrega, en la que había mucho sexo y en Nueva York; en esta segunda parte disminuye el peso de la segunda parte del título, se hace mucha referencia al sexo, parte esencial de la vida de las cuatro mujeres, pero sólo la mitad de la película se desarrolla en Nueva York. El viaje de las cuatro amigas a Oriente nos hace disfrutar de increíbles lujos y aventuras divertidas fuera de la Gran Ciudad. Las cuatro están perfectamente identificadas con su personalidad, todas muy divertidas, pero si hubiera que elegir una, yo me quedaría con Samantha, gracias a ella he conseguido hacer de las dos horas y media de película el momento del día en el que más me he reído. No obstante, puede resultar pesada en algunos momentos, se repite mucho el guión en las escenas en las que aparecen Carrie y su pareja; así como algunos vestuarios son demasiado extravagantes, tanto que puede resultar hortera. Pero es realmente buena si se quiere pasar un rato entretenido y de risas. Además, la película cuenta con la participación de personajes célebres, como Penélope Cruz, Liza Minelli o Miley Cyrus; y es que la película tiene que tener el lujo en todos los sentidos, hasta en los invitados.