
Valiente, cruda, original y emocionante.
Con spoilers
Quizás a muchos españoles esta cinta no le haya impactado cosa que a un servidor si le ha servido de apaño para considerarla de lo mejor del 2013 sorprendentemente ya que tanto Chris Evans como el resto del reparto están sublimes y la historia demuestra que todavía se puede sacar originalidad tanto en lo artístico como en lo visual dentro del cine de Ciencia ficción.
Quizás a muchos se les atragante algunos momentos tópicos como ese final evidente en parte pero necesario. Quizás a algunos se les haga pesada por el hecho de estar dos horas en un tren que nunca para. Pero esos quizás en mi opinión se derriten ante el talento de darle emoción el director a ciertas escenas y el ingenio con el que soluciona aparentes desastres vergonzosos que se salen del tono de la película como lo es la escena de la profesora con los niños dando clase con síntomas de unos niños con el cerebro lavado. Soluciona cada escena de la manera más imprevisible e ingeniosa que hasta las escenas de acción sin necesidad de recurrir al gore como otros directores las rueda de la manera más realista e impactante. Tanto que duelen hasta al propio espectador. ¿A quién no le dolió el congelamiento del brazo de uno de los tripulantes del tren?
Chris Evans demuestra que puede cambiar de registro y no ser solo un superhéroe guaperas con carisma. Es algo más que eso, capaz de liderar una tripulación de pobres hambrientos con la necesidad de tener un ápice de reconocimiento y de no sufrir las injusticias que sufren a cambio de que otros vivan bien como bien se muestra a lo largo del recorrido de los vagones. La banda sonora de Marco Beltrami es impactante y genera la tensión suficiente como para formar parte de forma necesaria en la cinta aunque no tenga un tema memorable ya que tampoco es necesario para el tono de la película.
El guión traslada esa crítica social hacia la política futurista de buscar un equilibrio como si para tener un primer o segundo mundo necesitásemos un tercero. Como si un zapato deba estar en el pie y no en la cabeza, como si para que funcione un tren deba estar activo todo el tren ya sea en el principio y en el final. Traslada ese mensaje con un final increíblemente emocionante y perturbador a la vez que triste de ver como hay que solucionar las cosas de la peor manera aunque sea para hacer justicia destacando un cameo final de Wilford que relativamente no sabía que ese actor realizaría ese papel.
En definitiva, una gran película emocionante, valiente, muy entretenida que te atrapa desde el primer minuto hasta que finaliza de una manera notable pese a que el plano final me resultase un tanto convencional.
Críticas de los usuarios