
Fuck the biopics
Sin spoilers
Érase una vez una película biográfica que superaba las convenciones de ese tipo de cine al mismo tiempo que sacaba partido de lo más provechoso de las mismas. No estoy hablando de 'La red social' -que también-, sino de 'Straight Outta Compton'. En un momento en el que la industria del cine ha conseguido que escuchar la palabra biopic sea sinónimo de bostezo, el filme centrado en la banda de rap N.W.A. se convierte en el ejemplo perfecto de reinvención del género más manido de los últimos años.
La historia de origen tenía un gran potencial, por lo que extraña que haya tardado tanto tiempo en llegar a la gran pantalla, teniendo en cuenta la agilidad de la maquinaria de Hollywood cuando el signo del dólar invade los ojos de los ejecutivos con una idea como esta. Pero el grupo fundado hace casi tres décadas retrató una realidad que sigue más que presente en Estados Unidos, por lo que sus rabiosas letras no han perdido la actualidad. Las revueltas y protestas en Ferguson y Baltimore han dejado patentes que la xenofobia y los abusos policiales siguen yendo de la mano a pesar de vivir en un país supuestamente civilizado y en el que la población afroamericana supera los 35 millones de personas. El LP que da nombre al largometraje reflejaba la situación que se vivía en Compton (California), durante los años 80. El reality rap quedaba inaugurado con el debut de N.W.A. que arrasó dando pie al éxito de uno de los magnates actuales de la música, Dr. Dre; iniciando la carrera del ahora actor Ice Cube; y sacando de las calles al hasta entonces narcotraficante Eazy-E.
Lo que hace que no nos encontremos ante un biopic convencional es precisamente que ese contexto no queda relegado a un segundo plano para que las alegrías y dramas de los componentes del grupo se sucedan de manera previsible, sino que todo queda enmarcado en un época de tensión, con escenas muy potentes a nivel dramático. Esas secuencias además nos muestran de dónde proceden las letras de las canciones de N.W.A., mostrándonos uno de los fines básicos de la creación artísticas: liberar las emociones reprimidas. Por eso cuando vemos la interpretación de 'Fuck the Police' en Detroit representada en la película, comprendemos lo que significaba este grupo de chavales a nivel social. Ya que además de cumplir con sus ambiciones y pasar por más fiestas en su gira de las que el ser humano medio vivirá en toda su estancia en la Tierra, marcaron el comienzo de una era.
La sinceridad inherente al rap fue la herramienta perfecta para darle alas a la denuncia social. Dándole poder a la palabra, al sentimiento y a la realidad. Esto queda captado en 'Straight Outta Compton', sin traicionar aquello que se quería transmitir en primera instancia, y los versos de N.W.A. son el hilo conductor perfecto para sellar una película sobresaliente.
Críticas de los usuarios