Indie stand up comedy

Es fantástico cuando sales del cine pensando en que, quizás, has encontrado el relevo a esa comedia romántica que ya tienes machacada de tanto humor. Y vas y la sustituyes por una historia de amor y tragedia escrita por los propios protagonistas, Kumail Nanjiani (quien también protagoniza la cinta) y Emily V. Gordon, que hace que ese "oh" que al final de la película se nos escapa a todos respire una cierta verdad.

El chico conoce a chica se aprovecha de un rollito indie que hace humor con lo más incómodo y de la cultura paquistaní que impide que la relación de Kumail y Emily pueda prosperar. Es como ver otra vez a Ian enfrentarse al padre de Toula y a su limpiacristales en 'Mi gran boda griega', sólo que en 'La gran enfermedad del amor' Emily no tiene la oportunidad de conocer a la familia de Kumail, pero ahí están las carcajadas que el público se echa "a costa" de las tradiciones paquistaníes y el empeño de la madre de Kumail para concertar un matrimonio.

No sólo de eso vive el sentido del humor de la película, que lo canaliza a través de un cómico siempre dispuesta a dar un buen revés en los diálogos, una madre (la de Emily, gloriosa Holly Hunter) que no puede ofrecernos más y una familia pintoresca que da las notas de color.

La combinación triunfa a base de naturalidad y un toque de frescura a la clásica comedia romántica. Lo que más puede chirriar es el ritmo que adopta la narración, que a veces se vuelve demasiado precipitado.