Si Scott nos quiere mandar a Marte... ¿Por qué no?

'Marte' aterriza en la cartelera aportando mucho más de lo que esperábamos No, aún no nos hemos cansado de recibir nuestra dosis anual de cine de ciencia ficción en el espacio. Si en 2013 disfrutábamos de una efectista 'Gravity' y en 2014 nos dejábamos enredar por los agujeros de gusano de 'Interestelar', en 2015 viajamos a 'Marte', un planeta que desconocemos y nos parece cercano al mismo tiempo.

Así que, partiendo de una idea brillante en la que un hombre permanece solo en un planeta sin recursos para la vida humana y que ha de sobrevivir hasta ser rescatado, pronto llega el turno de la reflexión: ¿Y por qué no? Así, con este claro y conciso interrogante, Ridley Scott nos bombardea emocionalmente durante dos horas y media de metraje hasta meternos dentro del traje espacial de Matt Damon y salir a recorrer el planeta rojo con él.

Son muchas las cosas que tenemos que dar por válidas antes de establecer nuestra más absoluta comunión con el film, pero la experiencia final no puede ser más satisfactoria. Y aunque a veces echamos en falta mayor realismo en el estado de ánimo del personaje interpretado por Matt Damon, al final, sentimos que Scott no solo nos ha comprado con luces y planos de los que dejan sin palabra, sino que además nos ha tenido flotando en la sala los mismos días que dura el rescate y que al terminar regresamos a la butaca con la misma emoción con la que Damon ansía volver a La Tierra.