Anderson se saca el Máster

Kubrick ha muerto, Kurosawa ha muerto y Woody Allen no goza de buena salud. Por suerte, hace algo más de una década apareció un director joven que, a pesar de su escasa filmografía, promete ganarse un puesto en la historia del cine y encabezar el regreso al arte de alta calidad.

Tras unas notables "Boogie Nights" y "Magnolia" ("Pozos de ambición" no me pareció tan buena ni "Embriagado de amor" tan mala), el director de Los Ángeles nos ofrece una película agotadora, compleja y mucho más profunda de lo que parece. Bien acompañados por una gran técnica visual y una perturbadora banda sonora, se sitúa la sobresaliente participación de los actores. Al contrario que muchos, Hoffman no me ha encantado con su interpretación, si bien reconozco que está a la altura (en "Boogie Nights" sí que me encandiló). Amy Adams y el resto del reparto también cumplen.

Pero sin lugar a duda, quien me ha apasionado profundamente es Joaquin Phoenix. Desde el primer minuto hasta el último, su brillante personaje, que destaca precisamente por ser todo lo contrario, lleva el peso de la cinta, es completamente imprevisible, un auténtico animal indomable. Para mí, su interpretación supera a la ligeramente sobreactuada de Day-Lewis en "Pozos de ambición", sin embargo, este año deberá lidiar contra él por el Óscar con la desventaja de haberse "saboteado" él mismo públicamente.

La parte negativa de la película se la lleva el desarrollo de la historia. A pesar que puede resultar de base muy interesante, Anderson no se moja demasiado en su crítica a la Cienciología, y los detalles punzantes, que los hay, están bastante camuflados. La lentitud, la ambigüedad y la excesiva longitud de algunos planos pueden resultar una carga o todo lo contrario, ya que ayudan mucho más a profundizar en los personajes. Son precisamente en estos en los que se centra la trama, en sus almas descarriadas y mentalidades bastante irreflexivas.

En realidad, el cineasta nunca se caracterizó por hacer films muy dinámicos, si no más bien largos y algo solemnes, la principal causa de que su cine no termine de convencer a buena parte del público. Sin embargo, su desarrollo es constante y hemos de dar por seguro que sacará grandes obras en el futuro. "The Master" es sin duda una película que habrá que revisionar varias veces.