Poco a poco

Por una vez, quería leerme los libros antes que ver la película. Así que ahogué mis ganas de ver "El corredor del laberinto" en cines, bien. En un par de meses ya me había leído toda la trilogía; así que me dispuse a ver la película. Tuve que verla dos veces seguidas; una en español y otra en voz original. Después, dividí mis opiniones en las cosas buenas y las cosas malas (o las cagadas, mismamente). En cuanto a las buenas: un casting bastante bueno, asemejándose mucho a cómo me los imaginaba en los libros (a excepción de Newt, por favor), unos efectos bastante aceptables, medianamente fieles a los textos del libro y a la psicología de los personajes...Pero luego llegan las malas (cagadas): el director decide interpretar el libro cómo a él mejor le parezca, justificándose en que "eso es muy difícil de adaptar a la gran pantalla", o "eso no me gusta, mejor lo cambio a como me salga de los huevos"; o "vamos a quitar las cosas cruciales del libro, total, la mayoría no los habrá leído". Pues NO, error Wes Ball, gran parte del público conocía los libros (el resto irían o por Dylan O'Brien o por el título y sus comparaciones -FALSAS- a Los Juegos del Hambre), y para los fans resulta decepcionante que se interpreten a una manera totalmente distintas cosas como la capacidad de hablar por la mente de Thomas y Teresa, o el suero de la laceración, o la forma de encontrar la salida...Y lo peor es que el mismo James Dashner (el escritor) estuvo al tanto de todos los cambios del director; presente en cada día de rodaje...¡y todo le parecía de puta madre! Anda, que te den.

Pero diré en su defensa, que sin leer los libros la gente sale de la sala contenta, habiendo visto una película entretenida (que se supone que es su fin), distinta a todo lo visto anteriormente (que no, que no se parece a Los Juegos del Hambre, joder), y que te deja con ganas de más. Así que espero que arreglen las cosas en las siguientes películas, si no quieren cabrear a un fan mucho más de lo que lo está ahora. Así que decido puntuar la película como tal, y no como interpretación del libro.