Guión flojo, buen ritmo, buena acción y una buena dosis de comedia......

Mira por donde esta es una de esas películas que se quedan pendientes por ver y que nunca se decide uno, no me daba buenas vibraciones, y mira tu que me ha sorprendido. Es una comedia romántica con raciones de acción, no es una gran película pero tiene muy buen ritmo, los diálogos son rápidos, el guión flojito con frases que dan risa, pero uno lo va llevando bastante bien. La película no aburre y es entretenida, tiene puntos muy ocurrentes y la cinta es para eso, para entretener y no le des mas vueltas. Heinrich es el malo y tras la muerte de su hermano quiere vengarse. Foster y Tuck son dos agentes especiales de la Cia, son amigos, inseparables y por motivos que no voy a contar son retirados de la acción, asignandole trabajo de oficina. Luego tenemos a Lauren que se cruza en la vida de los dos amigos; por cosas de la vida ponen sus datos en un ordenador y mira por donde Lauren también tiene los datos en una agencia de contactos, y acaban juntandóse todos jajajaja, la verdad es que no hay por donde pillarlo, pero las situaciones se van enredando y lo que es una amistad eterna, se convierte en una guerra por la chica, que acaba enamorada de los dos chicos. Si, la película es un poco absurda, pero se pasa un buen rato. Empieza con acción pero después es otra cosa, es mas comedia, salpicada de algo de acción. Foster y Tuck compiten para enamorar a Lauren y utilizan todas las técnicas y artilugios de los que disponen. El trío protagonista no son de los que se van a recordar, su trabajo es muy discreto y no brilla demasiado, pero junto a la historia y la trama y mezclando todo se crea un cocktail bastante aceptable, la verdad es que esperaba algo mucho peor, buena no es, lo sabemos, entretenida si y eso ya es mucho en estos tiempos.