Cuando el cine va de decir algo

Vi esta película sin tener expectativa alguna, sin saber nada de ella y sin siquiera saber de qué iba en general, y me impactó bastante.

Es una película sobre trastornos mentales. Sobre ansiedad, depresión, agorafobia... pero desde claramente el punto de vista de alguien que lo ha sufrido. El protagonista es un joven con el que muchos jóvenes (yo incluido) se puede sentir muy identificado. Tiene una familia que le quiere, amigos y talento y proyectos, y sin embargo, según sus propias palabras "muchas veces siento que todo es demasiado y que voy a explotar... pero nunca lo hago".

Es en muchas ocasiones a lo largo del metraje que se articulan ideas y sentimientos de este tipo de forma clara y bien pensada, hasta el punto de que piensas "esta peli es capaz de decir cómo me siento mejor que yo mismo". Se puede aprender más viendo sus discretos 100 minutos que en un millón hilos de twitter de gente cabreada con los neurotípicos.

Mención especial para Zach Galifianakis, el Sancho Panza de Craig. Su historia es quizá la que más importa, y su viaje es quizá el más apropiado. El punto en el que empieza la película y el punto en que termina describen lo que es vivir con depresión crónica de una forma desgarradora y tierna.

Muy recomendable.