Absolutamente predecible y totalmente obviable.

Me decidí a ir al cine, ya que la primera entrega me gustó bastante a pesar de ser un argumento muy explotado y por lo tanto es difícil de hacer películas que puedan sorprender al espectador. Aún así la primera entrega me sorprendió muy gratamente.

Bien, la verdad es que, con esta segunda entrega, me siento totalmente defraudado, simplemente está mal construida, y por fases sientes que te están tomando el pelo. Como por ejemplo, cuando la hija (Kim, Maggie Grace) va explotando granadas por los tejados de Estambul, como si eso pasara todos los días, y nadie le diera importancia. Tampoco me convence la persecución del Taxi, en el que es la hija la que conduce de manera profesional por esas caóticas calles, sin ni siquiera tener el carnet de conducir, patético.

También es increible la seguridad de la embajada de EE.UU. en Turquía y que además, con ese dispositivo de seguridad tan exagerado, un taxi se salte la barricada principal y no lo acribillen, también es patético.

Las escenas de acción están muy mal enfocadas, a pesar de ser buenas, y con bastante buen criterio.

La madre (Leni, Famke Janssen), la mejor parte de su actuación es cuando está inconsciente, no me gusta como actriz, y si a eso le sumamos el doblaje malísimo, deja un personaje que simplemente sobra.

Lo único salvable de la película es la actuación de Liam Nesson, que siempre cumple y puede hacer películas predecibles y obvias como esta, se dejen ver.

Mi 5 es porque a pesar de ser una película que no vale la pena ir al cine a verla, a los que le guste el cine de acción les gustará.