Más divertida de lo esperado

Tom Hardy se mete en la piel de Eddie Brock y su personaje encaja muy bien con el simbionte, ofreciéndonos momentos cómicos y disfrutables. Acostumbrados como estamos ya al uso de la comicidad en las películas de superhéroes, ésta supone un soplo de aire fresco al no utilizar el humor de forma reiterada con bromas que no hacen gracia. Los gags de 'Venom' resultan graciosos, aunque no desternillantes pero igualmente disfrutables. En cuanto al resto del film, decir que la historia es interesante y entretenida, aunque la primera parte es un poco más lenta mientras que el final de la cinta se desarrolla rápidamente y da la sensación de que falta más tiempo de película, puesto que no permite al espectador asimilar todo lo que está ocurriendo o conectar con las escenas más emotivas.